La capital de Georgia, Tibilisi, acoge desde hoy hasta el próximo 26 de abril el Training Camp organizado por Saski Baskonia, a través de la Fundación 5+11, dentro del plan estratégico con la Federación georgiana de Baloncesto. Un campus dirigido a 160 jóvenes de edades comprendidas entre los 14 y los 17 años.
El Director Técnico del programa es Borja Comenge, que estará acompañado en esta aventura por cuatro técnicos nacionales y por Juan Pedro Cazorla, adjunto a la secretaría técnica de Saski Baskonia. Durante dos semanas, los técnicos identificarán y medirán las aptitudes y la capacidad de estos jugadores para después seleccionar a los 16 mejores que participarán este verano en el Campus Internacional de Baloncesto Baskonia.
Durante la primera semana de trabajo los jóvenes estarán divididos en grupos de nivel y entrenarán situaciones abiertas, competitivas y de partido dentro de un programa ténico diseñado por el técnico baskonista. “Veremos a los jugadores en situaciones de 3×3, 4×4 y 5×5, en una situación no dirigida sino cómo juegan ellos naturalmente”, explica Comenge. “No les queremos condicionar en su juego porque queremos ver las virtudes y los déficits que tiene cada jugador”. Un trabajo que servirá para evaluar a los jugadores de cara a la segunda semana en la que “queremos aportar una mejora técnica en el tiro, en el bote o en el pase y evaluar el potencial de los jugadores de cara a futuro”, asegura el técnico.
Además de este trabajo, los jóvenes pasarán una serie de pruebas físicas de salto y aceleración “para medir su explosividad y llevamos pulsómetros para medir su capacidad cardíaca y compararlos con otros jugadores que hemos tenido con su misma edad”. Todo ellos quedará registrado en un archivo audiovisual con imágenes a nivel físico y técnico en base a los ejercicios que se vayan realizando. El hecho de que la Federación georgiana haya sido capaz de reunir a este número de jugadores y técnicos en pleno mes de abril es algo que Comenge valora muy positivamente. “Nuestra llegada ha suscitado un gran interés”. “Tener un convenio con un país que no deja de ser una antigua república ex soviética es muy positivo. Es una zona de baloncesto donde hay buenos cuerpos, buenas medidas antropométricas para este deporte. Como club hacemos muy bien de estar abiertos a este tipo de experiencias”.