El técnico vitoriano destaca la incorporación de Mekel al equipo ruso y explica que han cambiado un poco la estructura pero que continúan con su filosofía.
Laboral Kutxa Baskonia pone rumbo a tierras rusas hoy de madrugada. Les espera un largo viaje para enfrentarse el jueves al Nizhny Novgorod, rival de la décima jornada de Euroleague.
Ibon Navarro ha realizado la previa habitual esta tarde y ha hablado del duro viaje que les toca esta semana. “Tenemos que ir todos y tiene que ser así. Cuando tienes dos días gastados en viajar lo que te queda es eso para entrenar. Hoy hemos doblado para intentar ajustar alguna cosa y aprovechar. Allí tenemos un entrenamiento que será bueno y tendremos un día para el partido de Juventut, el problema es para todos los equipos de Euroleague”.
En la primera vuelta los baskonistas vencieron al equipo ruso pero hoy Navarro ha alertado de que este equipo “es un visitante muy incómodo porque ha ganado casi los mismo partidos en casa como fuera”. El técnico vitoriano ha explicado que sus jugadores importantes “mantienen el nivel y una línea muy regular. Los jugadores más jóvenes se sienten más arropados y sus prestaciones en rebote, recuperaciones y acierto sube en casa. Niznhy celebra cada partido de Euroleague porque es un premio y lo disfrutan, esto lo convierte en un equipo muy peligroso hasta la última jornada”.
«Es un equipo que mantiene un nivel y una línea muy regular tanto en casa como fuera de ella. Son muy peligrosos»
El vitoriano ha explicado que el rival del jueves “ha cambiado un poco la estructura del equipo al poder jugar con más pequeños pero la filosofía del equipo sigue igual. Están muy bien entrenados pero cambia un poco el dibujo con la entrada de Mekel”.
Ibon ha profundizado sobre el papel de este nuevo jugador. “A Taylor le ha quitado algo de responsabilidad y ahora hay un jugador como Khvostov que se siente más cómodo en el campo, en acierto y en defensa”.
«El grupo está muy bonito. Aquí nadie se va a dejar llevar»
Navarro ha hablado de la situación del grupo. “Está bonito, parece que se puede pensar que hay equipos que se han quedado descolgados pero ellos siguen ganando partidos y no sé si alguno puede todavía reengancharse. Nadie se va a dejar llevar”.
Sobre si el partido del jueves es una final o no, Navarro ha sido claro. “Cuando ganas una final ganas algo y si lo hacemos en Novgorod ni vamos a ganar nada ni vamos a estar clasificados así que no es una final. Es un partido muy importante que nos puede poner muy bien”.
Sin duda, se avecinan jornadas muy importantes hasta que finalice esta fase y para Navarro que todo se decida en la última “es posible, esa última jornada vamos a Málaga y Efes juega ante Fenerbahce, ojalá podamos llegar dependiendo de nosotros a esa jornada”.